martes, 30 de abril de 2013

Un juego con saudade

No me funciona internet como quisiera -al menos para descargar archivos- y me he quedado con muchas ganas de abrir un link colgado por mi querida 'F' en el feishbu, que a su vez abre un vídeo titulado: "Que harías en tu vida si el dinero no importara", y aunque es harto difícil suponerlo, he aprovechado esta invitación al juego de lo absurdo  para dejar volar la imaginación
Ya metida en faena de fantasear una vida inexistente de dinero, tan solo quedaría tirar del hilo del que pende lo inimaginable, con cierta forma de utopía; tan improbable como posible en según que cosas

A bote pronto lo primero que se me viene a la cabeza es confirmar que en este instante estaría empleada en lo que estoy haciendo que es escuchar, bastante sensiblera, a Cesaria Evora, a través de los altavoces que tengo conectados a mi notebook; maravillosa voz en esos ritmos melosos entre fados y brasileiro. Y me ha dado bastante alegría sentirlo así, de esa forma tan contundente, compulsa, y espontánea porque es señal inequívoca de que realmente estoy disfrutando de este instante.
                                                 
                                 http://www.youtube.com/watch?v=oWYKTiqPvYA
                                 http://www.youtube.com/watch?v=ERYY8GJ-i0I

Sin embargo puestos a imaginar iría más allá, y supuesto que no solo de música vivimos, fantaseo que estaría en una casa de campo, esa que ando buscando y que no hubiera tenido necesidad de comprar -porque hemos quedado que eso no vale en este juego- pero con la que un día cualquiera me topé y tras un certero flechazo entre nosotras (la casa, la tierra y yo), al día siguiente me trasladé con todos mis bártulos y la ocupé, sin más, sin esperar a que amainara el frío, cesaran las lluvias, la tierra empapara bien esa bendita agua caída, o las tomateras estuvieran trepando como locas los encañados instalados a tal fin.
Y allí estaría en este instante, tan ricamente sentada en una silla de anea, compartiendo atardecer; en el porche de la casa y echándole unos requiebros a las hortalizas (brócolis, lechugas y demás señoritas.....) Y entre col y col me marcaría, eso sí acompañada siempre, un bailoteo al ritmo de la caboverdiana 

Y colmada de dicha y felicidad en lo material y en lo intangible, no echaría de menos absolutamente nada; ni necesitaría lo más mínimo salvo la certeza de saber que esa felicidad importante y efímera se vería multiplicada por mil o tantas veces como fuera capaz de provocar algo extraordinario sacado de la sencilla chistera de mi vida 

1 comentario:

  1. Todo se te haría realidad, ya que la felicidad ya la pones tú misma.
    Eso es lo mas importante para alcanzar toda clase de deseos, sueños y quimeras varias.

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